Las competencias de un trabajador social se alcanzan con el despliegue de un conjunto de asignaturas de tipología variada.
Formación básica: estas materias aportan al estudiante la formación introductoria necesaria que permite equiparar a los estudiantes procedentes de las distintas vías de acceso. El diseño curricular de la formación básica incluye antropología, comunicación, derecho, educación, psicología, sociología y "habilidades del trabajador social", una materia instrumental que permite a los alumnos iniciarse en las capacidades que desarrollarán durante su vida académica y profesional.
Asignaturas obligatorias: dan respuesta al perfil profesional e investigador del trabajador social. Las materias se estructuran en los siguientes bloques de contenidos: fundamentos del trabajo social; métodos, modelos y técnicas del trabajo social; unidades de intervención del trabajo social; habilidades sociales y de comunicación del trabajo social; investigación aplicada al trabajo social; servicios sociales y política social; El desarrollo humano en el ciclo vital y en el medio social; derecho y ciudadanía; y, gestión de organizaciones.
Asignaturas optativas: el grado de Trabajo Social cuenta con una oferta muy especializada que pretende acercar al estudiante a los ámbitos de intervención propios del trabajo social y a conocimientos complementarios para los futuros profesionales. El estudiante podrá escoger entre una amplia oferta de asignaturas optativas aquellas que mejor respondan a sus preferencias personales.